Es febrero y quizás lleves “arrastrando” los síntomas de ese catarro varias semanas. ¿Y si  no es catarro? Si eres alérgico, probablemente esos síntomas sean de tu alergia al polen.

Entre enero y febrero, muchas de las cupresáceas y las arizónicas repartidas en todas las zonas de nuestro país se encuentran en floración y el polen campa a sus anchas por el aire.

Picor de ojos y garganta, “moqueo”, estornudos… Parece que hasta que no llega el buen tiempo primaveral no pensamos en la alergia y damos por hecho que nos hemos resfriado, pero, como te contamos, probablemente tu cuerpo está reaccionando a esos dichosos alérgenos.

¿Qué puedes hacer? 

Iniciar tu tratamiento. Si eres alérgico diagnosticado, tu médico debe haberte pautado un tratamiento completo para tratar y evitar cada uno de los síntomas. ¡Tómalo ya! 

De hecho, es mejor no esperar a que aparezcan los síntomas, adelantarnos y prevenir su aparición va a evitarnos más de un mal rato.

Pero ¿y si mi alergia es causada por otras plantas?

También te recomendamos adelantarte y empezar el tratamiento en febrero.

Los cambios en el clima hacen que las floraciones no sean exactas y muchas plantas que antes florecían en primavera , inician antes la liberación del polen ya que florecen antes.

¿Qué es la alergia?

Una alergia es una respuesta inmunológica (de defensa) frente a una sustancia (alérgeno) que, por norma general, no provoca ningún tipo de reacción en la mayoría de las personas.

Las personas alérgicas, desarrollan esta respuesta excesiva al contacto con los alérgenos y como consecuencia, aparecen los síntomas.

Síntomas de la alergia 

Son muy variados y dependen del paciente.

Suelen afectar a ojos, la nariz, la garganta o los pulmones. 

Los principales síntomas de la alergia al polen son:

• Conjuntivitis

• Picor en nariz, garganta y paladar

• Congestión nasal y estornudos

• Dificultad para respirar, tos y pitidos. Este conjunto de síntomas es conocido como asma polínico

Tratamiento

Evitar la exposición a alérgenos.

Medicación más común:

Antihistamínicos:

Alivian el goteo nasal, la picazón o el lagrimeo en los ojos, la urticaria, la hinchazón y otros signos o síntomas de las alergias.

Vía oral, nasal, tópica y oftálmica.

Corticoides:

Alivian los síntomas disminuyendo la inflamación relacionada con la alergia.

Vía oral, nasal, inhalada, tópica y oftálmica.

Adrenalina de emergencia.

Para casos graves con riesgo de sufrir un shock anafiláctico.

Inmunoterapia.  “Las vacunas”.

Esta vía terapéutica consiste en administrar a una persona alérgica repetidamente la sustancia que produce su enfermedad para conseguir su tolerancia.

Si crees que tus síntomas son compatibles con la alergia, consulta a tu médico o farmacéutico, pueden recomendarte un tratamiento que alivie tus síntomas.